La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por niveles elevados de azúcar (glucosa) en la sangre. Ocurre cuando el páncreas no produce suficiente insulina o el cuerpo no puede usarla correctamente.
El tratamiento de la diabetes tiene como objetivo controlar los niveles de azúcar en la sangre y prevenir complicaciones. Esto incluye el uso de medicamentos para reducir el azúcar en la sangre, la terapia con insulina, el autocontrol, la actividad física y una nutrición adecuada.
Es importante consultar a un endocrinólogo, nutricionista y personal médico para obtener asesoramiento y apoyo profesional. La ayuda psicológica también puede ser útil para corregir los aspectos emocionales de vivir con diabetes.
La clave para controlar la diabetes es controlar constantemente el azúcar en la sangre, seguir las recomendaciones de tratamiento y mantener un estilo de vida saludable.